La competitividad del calzado español aumenta en los mercados internacionales. Buenas noticias para la industria del calzado español que en el primer semestre de 2015 ha acumulado un valor de 1.480,6 millones de euros un 17,63% más que el anterior periodo de 2014 según datos del Departamento de Aduanas de la Agencia Tributaria de España. Poco a poco el comprar calzado con sello español está llevando al sector a datos históricos de ventas y presencia internacional.
¿Cuáles son las razones del éxito? El calzado español apuesta por la diferenciación del producto a través del diseño y la calidad. Desde España se exportan zapatos de calidad media, media-alta y alta. Además los proveedores son capaces de adaptarse a las necesidades productivas y demandas del mercado: somos flexibles y rápidos. Estos avances no serían posible sin una clara apuesta por el I+D y el respaldo ganado con mucho esfuerzo del sello de calidad Made in Spain.
Nuestros zapatos son muy competitivos, de máxima calidad y diseño. Otro constante es la búsqueda de equilibrio entre los procesos y el saber tradicional que dotan de valor diferencial al producto y por otro lado la innovación que permite reducir costes de producción y mejorar los procesos en general.
Además como dato positivo las ventas a nivel nacional también se recuperan. Y es que tenemos marcas de calidad, ¿quién no conoce a Panama Jack, Wonders, Mustang o Hispanitas? Hablamos de reinvención de un sector ya maduro en nuesto país capaz de competir con los precios y la producción en masa del gigante asiático que supone China. El calzado español va viento en popa.
¿Cuáles son las razones del éxito? El calzado español apuesta por la diferenciación del producto a través del diseño y la calidad. Desde España se exportan zapatos de calidad media, media-alta y alta. Además los proveedores son capaces de adaptarse a las necesidades productivas y demandas del mercado: somos flexibles y rápidos. Estos avances no serían posible sin una clara apuesta por el I+D y el respaldo ganado con mucho esfuerzo del sello de calidad Made in Spain.
Nuestros zapatos son muy competitivos, de máxima calidad y diseño. Otro constante es la búsqueda de equilibrio entre los procesos y el saber tradicional que dotan de valor diferencial al producto y por otro lado la innovación que permite reducir costes de producción y mejorar los procesos en general.
Además como dato positivo las ventas a nivel nacional también se recuperan. Y es que tenemos marcas de calidad, ¿quién no conoce a Panama Jack, Wonders, Mustang o Hispanitas? Hablamos de reinvención de un sector ya maduro en nuesto país capaz de competir con los precios y la producción en masa del gigante asiático que supone China. El calzado español va viento en popa.
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